Material resistente: Están fabricadas con materiales duraderos y resistentes, como poliéster o nylon, que ofrecen protección contra los elementos y la abrasión.

Impermeabilidad: Muchas cubiertas son impermeables para proteger el vehículo de la lluvia y la nieve, evitando la corrosión y el óxido.

Protección UV: Algunas cubiertas cuentan con capas reflectantes que protegen contra los rayos ultravioleta del sol, evitando el deterioro de la pintura y el interior del vehículo.

Ajuste a medida: Están diseñadas específicamente para adaptarse a cada modelo de automóvil o camioneta, lo que garantiza un ajuste ceñido y una protección completa.

Fácil instalación: Suelen ser fáciles de colocar y quitar, con características como elásticos, correas o cierres de cremallera que facilitan el proceso.

Transpirabilidad: Algunas cubiertas están diseñadas con materiales transpirables que permiten que la humedad escape, evitando la condensación y el moho.

Correas de sujeción: Muchas cubiertas vienen con correas de sujeción o hebillas ajustables para mantener la cubierta en su lugar, incluso en condiciones de viento fuerte.

Bolsa de almacenamiento: Algunas cubiertas incluyen una bolsa de almacenamiento conveniente para guardar la cubierta cuando no está en uso.